Ábside de la iglesia de Santa Pudenciana

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Nos encontramos ante el ábside de la iglesia del año 390 en Roma. Este mosaico pertenece a las artes figurativas en el período de la Iglesia oficial de los siglos IV y V. ya no se buscaba solamente el valor de lo simbólico, sino que también se desarrolló un interés por la calidad y la belleza.

Los mosaicos es una obra elaborada con pequeñas piezas que pueden ser de diversos materiales como piedra, vidrio u otros que tengan diversas formas o colores, esto recibe el nombre de teselas, que mediante yeso u otro aglomerante forman composiciones decorativas geométricas o figurativas.

Eran utilizados para la decoración de los lugares más destacados de los nuevos edificios religiosos, especialmente la bóveda de los ábsides, como es este el caso.

Junto con la aparición de los mosaicos, surgieron también nuevos temas iconográficos, uno de ellos es la exaltación de la Cruz, una gran cruz decorada con piedras preciosas, que simbolizaba la riqueza espiritual, y un campo de amapolas representaba la sangre derramada por Cristo. Se observa la entrega de la Nueva Ley, donde se mostraba a Cristo en el centro entregando la doctrina cristiana al apóstol san Pedro, representante de los judíos, y a san Pablo, representante de los gentiles o no judíos. Se manifestaba que el cristianismo era una fe universal, y que Jesús era el Salvador de los judíos y del resto de los hombres. Se puede representar la entrega de los Mandamientos a Moisés, Dios Padre sedente sobre un círculo, como idea del universo, entregaba a Moisés las Tablas de la Ley, afirmando así que los preceptos de los cristianos provenían directamente de Dios. Y como nuevo surgimiento, el Pastoral Celeste, una aplicación iconográfica del Buen Pastor  presentaba un Cristo, normalmente alejandrino, rodeado de ovejas y portando como bastón la cruz de la salvación.

En el mosaico de la imagen se muestra la entrega de la Nueva Ley en la que aparece la representación de Cristo siriaco. Se representa a Cristo en el trono, rodeado por los apóstoles. Se ven a dos figuras femeninas, que sería un foco de discusión, donde algunos piensan que se trata de santa Pudenciana y Práxedes, y para otros representa a la iglesia y a la Sinagoga, los templos de los cristianos y de los hebreos. Ellas aparecen coronando a Pablo y a Pedro. Al fondo del mosaico aparecen una serie de edificios que podrían ser las iglesias construidas por Constantino en Jerusalén. Junto a la cruz se encuentra el símbolo de los evangelistas, que es una de las más antiguas representaciones que se conservan.

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